Este es nuestro torneo

Advierte de que hoy ante el Alcorcón no valen descuidos, y que la diferencia de categoría hay que demostrarla Caparrós recalca que nos gusta la Copa y queremos llegar lo más lejos posible.

Comienza el torneo del k.o. para el Athletic. La competición que mejor se le ha dado a lo largo de su historia. Y los rojiblancos no están dispuestos a desaprovechar la ocasión. Esta vez, no. Después de lo vivido hace dos años con aquella histórica final ante el Barcelona, vuelven a tener depositadas muchas esperanzas en hacer un buen papel. Hay que olvidar el tropiezo de la campaña pasada a las primeras de cambio frente al Rayo Vallecano, pero entonces el equipo estaba inmerso en tres competiciones y el calendario se le quedó un poco grande. Esta temporada sólo disputan dos, y según reconoció ayer Caparrós «Es nuestro torneo. A mi y a los futbolistas nos gusta la Copa. Es la competición de nuestra gente y queremos llegar lo más lejos posible».

El destino les ha deparado para los dieciseisavos de final un rival que saltó a la palestra por los méritos del año pasado con la eliminación del Real Madrid. El Alcorcón es un Segunda recién llegado que tiene su feudo como fortín. Un equipo del que se ha sabido todo por aquella gesta, que además les sirve de acicate para esta ocasión. Es una buena piedra de toque para los rojiblancos que no deben descuidarse en el primero de los enfrentamientos porque se habrían quedado sin excusas. Caparrós sabe de la dificultad de un torneo caprichoso que en cualquier despiste te deja fuera. «En principio todo el mundo apuesta por ella, pero luego en el fútbol pasa lo que pasa, llega el que menos te lo esperas y te elimina». Porque al igual que el Athletic todos los clubes tienen sus aspiraciones, y más los modestos, para los que superar una eliminatoria ante un Primera además de prestigio, también supone una inyección económica importante.

Por eso, a pesar de ser una eliminatoria de ida y vuelta, el técnico rojiblanco tiene muy claro que la exigencia en ambos choques debe ser máxima para los suyos. «El año pasado nos marcaron dos goles en el primer encuentro y ahí comenzó a forjarse la eliminación», reconoció. Para evitar circunstancias parecidas, ayer lanzó una advertencia: «no valen descuidos. Hay que hacer un buen partido los noventa minutos». Es su máxima preocupación. No quiere más 'alcorconazos'. «Hay que jugar con la máxima atención, tener cuidado con las segundas jugadas de los rivales en un campo estrecho. Sin embargo, este tipo de acciones también se nos dan bien a nosotros, por lo que hay que sacarles el máximo provecho».

Partido clásico

Otra de las claves para salir airoso del choque ante los madrileños estará en la defensa, una línea de cuyo trabajo el técnico no quedó muy satisfecho en el pasado encuentro de Liga ante el Sevilla. Y hoy la repetirá en su mayor parte. La única incógnita está en saber quién ocupará el lateral izquierdo; Castillo o Aurtenetxe. «Me gustaría que fuera muy contundente, trabajamos para ello. Tenemos que demostrar que somos poderosos porque sino nos puede costar caro».

Caparrós espera un partido clásico en esta competición, con un campo lleno y un conjunto rival que saca la máxima rentabilidad a un terreno de juego de pequeñas dimensiones. «Tienen jugadores de mucha envergadura. Ya lo vimos el año pasado ante el Real Madrid en Copa y esta temporada en Liga donde se están haciendo muy fuertes». El Athletic saldrá al estadio de Santo Domingo «con máximo respeto». El andaluz conoce a su técnico, Juan Antonio Anquela, «que se ha ganado estar en el fútbol profesional, y que nos lo va a poner muy difícil. Eso nos tiene que servir de exigencia. Eso, y lo que le ocurrió el pasado martes al Madrid que empató con el Murcia, un Segunda B. La categoría hay que demostrarla en el campo y no nos pueden ganar en actitud».