Cierra el mercado de fichajes

El Athletic tira de una inversión conservadora y ocupa el decimotercer puesto en gasto de fichajes

"¡Cómo si lo cierran a las 6 de la mañana!". Suena a desinterés. Como si la cosa no fuera con él. La exclamación salió desde los pasillos de Ibaigane.

El Athletic se ausentó del último día de vigencia del mercado de fichajes, que cerró a las 24.00 horas de ayer. No en vano, el club rojiblanco ni se asomaba al mismo desde muchas fechas atrás. Es la tranquilidad que aporta haber hecho los deberes con antelación. Ni se compra nada, ni se vende nada. La salida de Iñigo de Cerio al Córdoba, en calidad de cedido, se convirtió en la última operación, que se produjo dos semanas atrás.

El Athletic se dedicó ayer a analizar los movimientos de sus rivales en Primera División. La Junta Directiva presidida por Fernando García Macua ya conocía su rol en este escenario. Su inversión en refuerzos se ha elevado a 2,9 millones de euros, por lo que sólo cuatro conjuntos (Osasuna, Zaragoza, Sporting y Racing) se han gastado menos que la entidad bilbaina, una vez que tanto Deportivo, Mallorca y Levante no estaban habilitados, debido a su situación económica y jurisdiccional, para efectuar contrataciones, con lo que se tenían que conformar con operaciones en las que únicamente entraban jugadores cedidos o con la carta de libertad en la mano.

El esfuerzo del Athletic supera al del curso pasado, cuando sólo tuvo que invertir en la contratación de Xabi Castillo, con un desembolso inicial de un millón de euros, mientras que el resto del millón pactado, según desveló DEIA el pasado junio, se efectuará en diferentes plazos en función de los partidos que recorra el durangarra como rojiblanco. El primero de ellos, cifrado en 200.000 euros, lo tendrá que ejecutar cuando el lateral izquierdo, que ha arrancado la temporada a la sombra de Jon Aurtenetxe, alcance los 35 encuentros oficiales cuando ya ha tomado parte en 33.

La Real Sociedad, por su parte, en su vuelta a la Primera División, ha reforzado principalmente su delantera. La llegada de Joseba Llorente, procedente del Villarreal, y de Raúl Tamudo, del Espanyol, hacen que el equipo txuri-urdin, sabedor de la importancia de hacer goles, sea un firme candidato a mantener la categoría. El resto de incorporaciones son las de Sutil, Sarpong e Ifrán, tres jugadores que esperan rendir a un buen nivel en Anoeta. Además, los donostiarras han conseguido mantener el bloque del año pasado, y especialmente a uno de sus grandes valores, el guardameta chileno Claudio Bravo. Sin mucho trabajo en las oficinas del club en las últimas horas, los de Martín Lasarte esperan al mercado invernal para hacerse con los servicios del central noruego Demidov.

Los despachos del Osasuna estuvieron algo más activos que los de la Real, que, aunque sin apurar a última hora, consiguieron la cesión de Nelson, procedente del Betis. Así, el jugador brasileño acompañará en su nueva aventura a Damiá, con quien compartió vestuario en los últimos años en el club sevillano.

El equipo que sí movió ficha hasta última hora fue el Málaga. El equipo andaluz, que es propiedad de un jeque árabe, firmó a lo largo de ayer las incorporaciones de Kris Stadsgaard y de N"Diaye. El Hércules, después de lograr a atraer a la ciudad alicantina a Trezeguet, consiguió la cesión de Drenthe, procedente del Real Madrid. Otro jugador que cambió de equipo para quedarse en la Liga fue Caicedo, que tras jugar en el Málaga lo hará ahora a préstamo en el Levante, procedente del Manchester City. El Barcelona, tras la marcha de Touré y la negativa del Arsenal a vender a Cesc, incorporó a sus filas en los últimos días de mercado a Javier Mascherano, por una cantidad de 22 millones de euros.

marchas importantes La Liga, acostumbrada a incorporar grandes jugadores a los equipos que la componen, perdió durante el mercado estival a nombres importantes. Los más llamativos fueron los casos de Raúl y Guti, que tras una vida entera en el Real Madrid se marcharon al Schalke 04 y al Besiktas, respectivamente. Otros nombres propios fueron los de Ibrahimovic, que tras un año en Can Barça, puso rumbo al Milan y la de David Silva, ya que el campeón del mundo dejó el Valencia para irse al Manchester City.